HERE COMES THE SUN
Los que tenemos cierta edad, recordaremos aquella canción de los Beatles, dentro del álbum Abbey Road, cuya portada es un icono de la cultura pop. Se llamaba: Here comes te sun (Aquí viene el sol). Pero no voy a hablar de música, sino de cómo podemos afrontar algunos problemas presentes y futuros. En 2021 el precio de la energía eléctrica en el mercado (Pull) se disparó con una subida del 194%, respecto al año anterior, y en 2022 volvió a marcar una tendencia alcista del 72%, respecto al año 2021. Esta situación, como no podía ser de otro modo, ha generado un grave problema a las empresas españolas.
El Pull siempre se ha caracterizado por su volatilidad, aunque nunca había sido tan acusada como en los dos últimos años. Por otro lado, en el sistema eléctrico español la generación eléctrica está fuertemente centralizada. Generamos electricidad desde grandes infraestructuras: centrales térmicas, hidroeléctricas, parques eólicos, parques fotovoltaicos, etc. Aunque las fuentes primarias de las que se obtenga energía sean renovables (agua, sol o viento), seguimos generando de forma centralizada, necesitando una gran red de transporte y distribución para llevar dicha electricidad a los puntos de consumo.
Esa enorme red tiene sus costes, que el consumidor paga en forma de peajes de acceso, a los que también se añadirán diversos cargos públicos por razones de carácter más político que técnico en muchos casos. En este escenario, ¿podemos hacer algo los empresarios para
reducir nuestros costes energéticos y trabajar en un entorno más predecible? Hasta 2018 la respuesta era simple: No. Pero, a partir de
ese año se han producido modificaciones favorables del marco regulatorio del autoconsumo fotovoltaico y podemos actuar. Actualmente el autoconsumo permite generar la electricidad directamente donde se consume, disminuyendo la utilización de las citadas redes de transporte y distribución, que traen la electricidad desde puntos lejanos. Así, la generación en un futuro será menos centralizada y estará, en mayor medida, más próxima a los puntos de consumo (nuestras empresas, nuestras viviendas…). Lo que se conoce como generación distribuida. La tecnología fotovoltaica está muy desarrollada y sus rendimientos han mejorado muchísimo en los últimos años, mientras sus costes se han reducido notablemente, incluido el mantenimiento.
Su fuente primaria, el sol, es gratis y España cuenta con el mejor recurso solar de Europa. Una vez que amortizamos el coste de la instalación, que puede autofinanciarse con el ahorro que genera, disponemos durante muchos años de energía eléctrica a coste cero.
Además, a finales de 2022 se ha abierto una nueva puerta: La posibilidad de crear comunidades energéticas en un radio de 2 km entre el punto de generación y los puntos de suministro o consumo. Lo analizábamos recientemente en un webinar de la Asociación (02/03/2023).
Con ello, muchos polígonos industriales podrán sumarse al autoconsumo, aprovechando importantes economías de escala y disponiendo de energía limpia para las empresas de la zona, a bajo coste. Será aún más rentable.
Los próximos años la energía eléctrica todavía seguirá siendo cara y hay que aprovecharlos para amortizar con mayor rapidez el coste de las instalaciones fotovoltaicas, a través del ahorro. Después se podrá disfrutar de una energía prácticamente sin coste y, por tanto, sin competencia.
Coincidiendo con la subida de precios de la energía eléctrica, el autoconsumo ha crecido exponencialmente en España en los dos últimos años: un 102% en 2021 y un 108% en 2022. Y la tendencia continúa. Por tanto, como decían los Beatles: Here comes the sun.
Articulo redactado por:
Javier Martín, consejero delegado ISF Autoconsumo
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