La gastronomía andaluza como reclamo del turista

Las condiciones geográficas de Andalucía son uno de los grandes activos para hacer del turismo su mayor fuente de crecimiento. No obstante, íntimamente unidos a la tierra, los alimentos de Andalucía y su gastronomía se convierten en otro de los imprescindibles reclamos para acoger a miles de visitantes. Hoy en LANDALUZ, vamos a mostrarte algunas de las claves de este proceso.

Las ocho provincias de Andalucía presumen de un estado de salud envidiable en lo que a riqueza gastronómica se refiere y son innumerables los productos que se han posicionado como signo distintivo de una comunidad, donde cada alimento es sinónimo de calidad.

Según palabras del exconsejero de Turismo de la Junta de Andalucía, Rafael Rodríguez, el turismo gastronómico atrae cada año a una media de 650.000 visitantes. Sin que exista ningún dogma, las razones del triunfo de la gastronomía andaluza como reclamo turístico son variopintas y vamos a tratar de reflejarlas en los siguientes párrafos. ¡No pierdas detalle!

1. La calidad de la materia prima

Como ya hemos deslizado previamente, las condiciones naturales de la tierra fortalecen a su sector agroalimentario como uno de los bastiones de su economía. Los alimentos de Andalucía, en su conjunto, son hoy una marca consolidada a nivel mundial, tal como prueba el crecimiento continuo de sus exportaciones.

Cultivos de secano y regadío, ganadería, productos de mar y montaña… La oferta de Andalucía es amplísima y sus empresas de alimentación se esmeran cada año en perfeccionar la producción, añadiéndole un sello propio con alma gourmet.

2. La riqueza gastronómica

Si a la inconfundible calidad de los alimentos, le sumamos la inmensa riqueza gastronómica de la tierra, el cóctel es extraordinario. Andalucía es producto de la huella que han dejado en su ser todas las civilizaciones pasadas. Fenicios, griegos, romanos, árabes, visigodos y cristianos, entre otros, han pasado por su territorio y la gastronomía se ha beneficiado de las sucesivas ocupaciones.

En Andalucía confluyen una enorme variedad de recetas, fruto de la mezcla de culturas y el gusto por la comida tradicional, que hoy son considerados manjares en todo el mundo. Hoy, su gastronomía es uno de los máximos exponentes de la cocina mediterránea, una cualidad decisiva a la hora de atraer visitantes.

3. La orientación al turismo gastronómico

Teniendo en cuenta las dos características anteriormente citadas, el auge del turismo gastronómico convierte en Andalucía en uno de sus potenciales destinos. Como consecuencia de ello, las instituciones y empresas de alimentación han comenzado a trabajar de forma coordinada para ofrecer al visitante lo mejor de sí mismas.

Gastronomía es sinónimo de cultura y en torno a estos dos conceptos, las rutas gastronómicas, las catas y degustaciones han aumentado su oferta durante los últimos años con el objetivo de segmentar un turismo, donde el 10% de los visitantes a nivel nacional hacen de la gastronomía su principal razón para viajar.

Todas estas razones, unidas al importante desarrollo experimentado por la alta cocina durante la última década convierten a la gastronomía y los alimentos de Andalucía en uno de los reclamos más trascendentes para el turista, lo que supone una magnífica oportunidad para todas sus empresas, pertenecientes al sector agroalimentario.